Hola Mark,
Trabajo en un despacho de diseño, y uno de nuestros clientes me ofreció un proyecto, pero sin el despacho de por medio, fuera de mis horas de trabajo. ¿Sería correcto tomar el proyecto? - Mariana.

Hola Mark,
Trabajo en un despacho de diseño, y uno de nuestros clientes me ofreció un proyecto, pero sin el despacho de por medio, fuera de mis horas de trabajo. ¿Sería correcto tomar el proyecto? - Mariana.

Hola Mark,
Trabajo en un despacho de diseño, y uno de nuestros clientes me ofreció un proyecto, pero sin el despacho de por medio, fuera de mis horas de trabajo. ¿Sería correcto tomar el proyecto? - Mariana.

La respuesta corta es no, pero la práctica profesional está llena áreas grises, lo cual hace que sea un tema interesante para discutir. Todo se podría reducir a que depende de las reglas que ponga tu empresa, o el acuerdo que tengas con ella. Pero hay tantos entresijos que es difícil distinguir lo que es correcto de lo que no (aun para la persona que te emplea), y por lo tanto los casos se consideran uno a uno.

Debo de aclarar que a veces me sorprende la facilidad con la que mis colegas (que trabajan de tiempo completo en un estudio/agencia) toman proyectos freelance sin pensarlo un momento. Quizás tiendo hacia lo estricto, y estoy seguro de que habrá muchas personas en desacuerdo conmigo. De cualquier manera, escribiré mis reglas personales aceptando que tienen espacio para discusión.

1. No puedes freelancear para una agencia que sea competencia de la empresa para la que trabajas

La mayor parte de agencias tiene una plantilla de tiempo completo y tira de freelances para superar picos de trabajo. Normalmente no toman en cuenta a personas que ya tienen un trabajo de tiempo completo, pero si ya has trabajado con ellos, y saben que trabajas bien y cumples las cosas a tiempo, es posible que te pregunten si estás disponible.

O quizás trabajes como diseñador in-house de una empresa que no tenga nada que ver con diseño, digamos un sitio para comprar o rentar vivienda. Este caso es aún peor, porque estás llevando toda la experiencia acumulada a la competencia.

Lo mejor es responder que no, porque seguramente tendrás que esconderlo de tu empresa actual. Acumular portafolio de calidad es algo que deberás hacer constantemente, y esconderlo te dará algo de dinero, pero ningún prestigio profesional. Y si eres diseñador in-house tu reputación puede resultar bastante dañada si lo haces.

2. No puedes ser competencia de tu propia empresa

Si el cliente--aún en un caso remoto--podría contratar a tu empresa, lo mejor es sugerir que contraten a tu empresa. Esto fastidia bastante a los que trabajan para despachos de diseño/desarrollo web, porque elimina a la mayor parte de los posibles clientes. En cambio, a los diseñadores in-house se les abren muchas posibilidades.

Una excepción a esta regla es si piden una rebanada muy específica de tus habilidades, y que tu empresa no ofrece como servicio. Digamos que tienes experiencia haciendo pruebas de usabilidad, y tu empresa no ofrece ni le interesa proporcionar este servicio. O eres un programador trabajando en un despacho de diseño, y te piden mejorar el rendimiento de una base de datos. Estás trabajando sobre el mismo producto final (una web) pero proporcionando un servicio que no entra en conflicto con los intereses de tu empresa.

Esta regla tiene muchos matices, tu empresa puede hacer solamente proyectos grandes, y el proyecto que te ofrecen es pequeño, por ejemplo. Pero donde no hay matices es regresando al tema original de la pregunta: no puedes trabajar para empresas que ya han trabajado con tu empresa, es mala práctica profesional de su parte, y de tu parte también si aceptas el proyecto.

3. Puedes hacer todos los proyectos personales que te apetezcan

Fuera del trabajo puedes hacer lo que te prefieras en tus horas libres. Incluyendo proyectos personales, con ánimo de lucro. Hacer proyectos trae experiencia, lo cual en última instancia beneficia a tu empresa. De hecho creo que se debería de incentivar desde dentro.

4. Puedes hacer proyectos sin ánimo de lucro

Siempre tendrás al amigo o pariente que te pida unas tarjetas de presentación, o una web pequeña para su negocio. Son cosas que vienen con el hecho de ser diseñador, al igual que a un programador no dejarán de pedirle que le arreglen la computadora, o a un doctor que le pidan que vea a su sobrino. Cosas de la vida.

Esto también incluye colaborar con causas en las que crees, siempre que no cobres, o lo que cobres sea simbólico.

5. Puedes seguir trabajando sobre proyectos que has hecho anteriormente

Los diseñadores frecuentemente saltan entre el freelance y el trabajo de tiempo completo. Muchas veces, llegan a una empresa con una estela de clientes tras de sí que necesitan cosas pequeñas con los proyectos completados, o quizás algún proyecto sin completar. Son contratos que se hicieron antes, y por lo tanto podrás seguir colaborando, siempre que no afecte tu desempeño en el trabajo y no dediques ni un minuto del tiempo de tu empresa a tus propios clientes.

Estas son mis reglas personales, estoy seguro que habrá mucha gente que piense que es tu propio tiempo, y que eres libre de hacer lo que quieras con él. La discusión constructiva es más que bienvenida.